Con la situación que enfrentamos en la actualidad, hay empresas que comprenden la importancia de comunicar con video, reconociendo que es mucho más efectivo y de esta manera hacen frente a la nueva normalidad.
Un video corporativo siempre debe ser realizado por profesionales que controlen el proceso desde su organización y preparación del guion, hasta su producción, edición y difusión; no es conveniente confundir las posibilidades técnicas de un dispositivo con un resultado de calidad profesional, los beneficios definitivamente no serán los mismos.
Con la nueva normalidad, es necesario aceptar que no puedes basarte solo en vender un producto, es realizar una buena estrategia de video marketing, además, deberás aportar valor a tu posible cliente y eso hará que asocie tu marca una vez llegue al momento de decisión en la compra.
El contenido audiovisual logra un mayor engagement, se obtiene mayor implicación por parte de los receptores. El video es mucho más atractivo y flexible al ecosistema digital, las demostraciones alcanzan más valor, generan empatía y transmiten emociones.
Con esta nueva normalidad, donde nuestro tiempo transcurre la mayor parte del día frente a una PC, laptop, tableta o cualquier dispositivo móvil, en el que nuestro sentido del oído se agudiza por todo lo que sucede alrededor, existe una especial atención al sonido. Un buen audio puede soportar un vídeo mediocre, sin embargo, si el audio no es el propicio, todos los defectos quedarán mucho más expuestos.
A través del video muchas instituciones logran comunicar los protocolos de seguridad e higiene dentro y fuera de ellas, fomentan el uso de esta gran herramienta de comunicación y logran llevar el mensaje a otras entidades.
El video es la clave para llevar tu negocio a otro nivel y mejorar las ventas se debe convertir en unas de las metas de tu empresa.
Tengamos claro que el vídeo no es una tendencia y ha llegado para quedarse así como la nueva normalidad.